El capítulo 13 que da fin a la primera temporada de la serie de creada por Daniel Ecija firma un éxito de audiencias superando a Gran Hermano Revolutions
La serie creada por Daniel Ecija, producida por Globomedia y emitida en La 1 durante las noches de los jueves desde primeros de septiembre firma un final de temporada con éxito en audiencias. Estoy vivo, consolida así un triunfo de la ficción española ante el reality de Gran Hermano Revolutions, principal apuesta de Telecinco para competir con La 1 en el prime-time de los jueves.
El final de la primera temporada de Estoy vivo, con un capítulo 13 de alta tensión, supo mantener al espectador ante la pantalla consiguiendo un 14.7% de cuota de pantalla media y un total de 2,3 millones de espectadores. Por su parte Gran Hermano Revolutions consiguió una cuota media del 15%, pero con un total de 1,633,000 espectadores.
El dato arroja de la audiencia de Gran Hermano Revolutions muestra los peores números en una final desde el inicio del reality en Telecinco con el estreno de su primera temporada en el año 2000, donde casi sobre pasaron los 9 millones de espectadores.
El éxito de la serie, revelación de esta temporada en La 1 ha significado la renovación para una segunda temporada y ha generado un seguimiento similar a series también emitidas en la televisión pública como Águila Roja o Cuéntame. Los guionistas de la serie ya trabajan en las tramas que se introducirán tras el final de la temporada, realizando un giro más cercano al terror sobrenatural e introduciendo aventuras que generarán nuevas investigaciones policiales.
Pese a haber estado enmarcada en la ciencia ficción, la serie ha introducido durante toda la temporada elementos fantásticos que han sabido sobrellevarse con un guión excelente. El trabajo técnico en la producción de Estoy vivo también es digno de elogio ya que introduce a la ficción española en unos términos de calidad exigibles a programas televisivos internacionales e incluso a la ficción cinematográfica.