La serie de la ABC que sustituía la emisión de LOST ha sido retirada de parrilla con efectos inmediatos.
Ya en su primera noche, que se emitieron 2 capítulos, empezó con 16 millones de espectadores bajando hasta 8 millones.
En las semanas siguientes ha ido bajando cada vez más de audiencia hasta no llegar ni a los 5 millones de espectadores.
La verdad es que venía siendo bastante clara la cancelación de esta serie.